En el año 1997, Argenis Cruz dio vida a ARGUZ. Su inspiración surgió de la rica tradición tabacalera que lo rodeaba y su deseo inquebrantable de superarse a sí mismo. Desde sus humildes comienzos hasta convertirse en un referente, esta es nuestra historia.

Argu, como cariñosamente le llamaban, comenzó su andadura como torcedor en una de las fábricas más emblemáticas de su ciudad. Allí, entre hojas de tabaco y aromas cautivadores, aprendió los secretos ancestrales de la artesanía del cigarro. Cada giro de la hoja, cada nudo cuidadoso, se convirtió en parte de su ser

El destino le sonrió cuando tuvo la oportunidad de trabajar para grandes marcas internacionales. En esos talleres, bajo la tutela de un maestro legendario, Arge absorbió conocimientos invaluables. Las manos del maestro le enseñaron más que técnicas; le transmitieron la pasión, la dedicación y el amor por el tabaco.

En ARGUZ, no solo fabricamos cigarros; tejemos historias. Cada hoja enrollada es un capítulo, cada humo exhalado es un verso. Nos enorgullece ofrecer una experiencia que trasciende el tiempo y el espacio. Únete a nosotros en este viaje, donde el pasado y el presente se funden en un abrazo de sabor y elegancia.